Tener la piel mixta o grasa puede convertirse en toda una pesadilla cuando se trata de utilizar productos o tratamientos para cuidarla. Sacarle el máximo partido y esplendor dependerá en gran parte de ti y de tu constancia, y en otra parte, de que sigas los consejos adecuados para el cuidado de pieles mixtas y grasas. ¡Aquí te damos algunos prácticos y eficaces!
Cómo cuidar las pieles mixtas y grasas
Cada tipo de piel requiere cuidados específicos para que luzca saludable y brillante. Las mixtas y delicadas parecen ser las más complicadas de cuidar, pero sabiendo cómo hacerlo todo resultará más sencillo.
Pieles mixtas
Para cuidar las pieles mixtas, ten en cuenta estos consejos:
- Limpieza amable. Lava tu rostro con un limpiador suave para eliminar impurezas sin resecar. ¡Tu piel mixta merece amor!
- Protección solar siempre. Nunca olvides el protector solar, incluso en días nublados. ¡Tu piel mixta te lo agradecerá!
- Productos no comedogénicos. Asegúrate de que tus productos no obstruyan los poros. Tu piel mixta merece respirar.
- Controla el brillo. Para combatir el brillo en la zona T, lleva contigo papeles absorbentes de aceite.
- Mascarilla de arcilla ocasional. Una mascarilla de arcilla una vez a la semana ayuda a controlar la producción de grasa.
- Dieta equilibrada. Come alimentos ricos en antioxidantes y bebe suficiente agua para mantener tu piel saludable.
- Persistencia es clave. Los resultados no llegan de la noche a la mañana. Sé constante con tu rutina de cuidado.
- Manos fuera. Evita tocar tu rostro con las manos sucias para evitar brotes innecesarios.
- Maquillaje no graso. Usa maquillaje sin aceite y no comedogénico para no agravar tus problemas de piel.
- Exfoliación equilibrada. Exfolia una vez por semana para deshacerte de células muertas, pero no exageres para no irritarla.
- Hidratación inteligente. Usa una crema hidratante oil-free para mantener tu piel equilibrada. Sí, las pieles mixtas también necesitan hidratación.
Pieles grasas
En el caso de las pieles grasas, los consejos son similares, con algunos apuntes a tener en cuenta:
- Limpieza adecuada. Comienza tu rutina con un limpiador suave, pero efectivo, para eliminar el exceso de grasa y las impurezas sin resecar tu piel.
- Exfoliación moderada. Exfolia tu piel una o dos veces por semana para eliminar células muertas y prevenir poros obstruidos, pero evita hacerlo en exceso para no irritarla.
- Hidratación equilibrada. Opta por una crema hidratante libre de aceites para mantener tu piel en balance. La hidratación es esencial para evitar que tu piel produzca más grasa.
- Productos no comedogénicos. Asegúrate de que tus productos de cuidado de la piel sean no comedogénicos para evitar que obstruyan los poros y provoquen brotes.
- Controla el brillo. Lleva contigo papeles absorbentes de aceite para mantener a raya el brillo durante el día.
- Mascarillas de arcilla ocasionalmente. La arcilla es elemento perfecto para controlar la producción de grasa.
- Sé constante. El cuidado de la piel lleva tiempo, así que sé paciente y mantén una rutina constante.
- Maquillaje sin aceite. Utiliza maquillaje sin aceite y no comedogénico para reducir los brotes.
- Gestión del estrés. Practicar técnicas de relajación puede ayudar a reducir el estrés, que a su vez puede mejorar la salud de tu piel.
¿Sabías que existen tratamientos estéticos que ayudan al cuidado de las pieles mixtas y grasas? Combinados con estos consejos te ofrecen resultados óptimos antes de lo que imaginas. En nuestro centro tenemos algunos para ofrecerte que te vendrán genial. Pásate y te asesoraremos personalmente de cuál es el más indicado para ti.