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¿Cómo hacer masajes de espalda? | 6 tips para hacerlo en casa

¿A quién no le gusta llegar a casa y que le den un masaje relajante? No hay duda de que a todos. Sea que vivamos en pareja, con amigos o con nuestra familia, siempre es bueno que al menos dos personas sepan cómo hacer masajes de espalda en casa. Hay que tener en cuenta que un masaje para aliviar dolores musculares lleva implícito mucho más que un simple masaje relajante. Por tanto, el segundo lo puede realizar cualquiera sin estudios previos, siempre y cuando tenga unos tips para hacerlo.

Beneficios de los masajes en la espalda

Durante años los masajes fueron un privilegio de unos pocos, mientras que a día de hoy, cualquier tiene acceso a ellos, y es más, con unos consejitos se pueden hacer en casa. Es hora de que tú y tu pareja aprendas para que siempre haya alguien preparado en caso de que el otro lo necesite. ¿Por qué?

  • Alivia el estrés. Sea cual sea nuestro trabajo seguro que estamos sometidos a estrés y tensiones que se van acumulando día tras día y para los que necesitamos una forma de evasión. El masaje puede ser esta.
  • Relaja el cuerpo. No solo se relaja la mente con un masaje de espalda sino el cuerpo al completo, ya que muchos grupos musculares se unen en esta zona. Por tanto, las tensiones musculares se alivian, y como resultado, nos sentimos más ligeros y renovados.
  • Evita el insomnio. Una de las principales causas del insomnio es el estrés, los nervios y la ansiedad. Gracias a los masajes de espalda, como estos desaparecen, el insomnio también se va. Además, los masajes también aumentan la melanina, encargada del sueño.
  • Mejora el funcionamiento del sistema inmunitario. 
  • Mejora el estado de ánimo gracias a la producción de endorfinas.

Cómo hacer masajes de espalda en casa

Vistos todos los beneficios seguro que ya estás deseando aprender para hacer estos masajes relajantes en casa. Pues bien, vamos a ello.

Elige el espacio

Este puede que sea uno de los puntos más importantes. Debe ser una habitación en la que no haga ni frío ni calor, con una luz tenue, y muy tranquila, donde no haya ruidos.

Elige la cama

Debes tener una camilla o un espacio en el que la persona se sienta realmente cómoda. Que su cuerpo quepa entero y relajado y que no sea ni demasiado blando ni demasiado duro.

La higiene

Es recomendable que la persona que se vaya a dar el masaje se duche antes y que la que vaya a realizarlo se lave las manos. Si es invierno, será necesario calentarlas.

Aceites

Necesitaremos un aliado para el recorrido por la piel para lo cual podemos usar aceites. Aunque hay muchos para elegir, se recomienda el aceite de almendras porque tiene un olor muy agradable y suave. Este deberá estar templado.

Música

Aunque el silencio incita a la relajación, una música adecuada también puede hacerlo. Vigila que el sonido sea suave y que la melodía sea acorde a la situación.

Los pasos a seguir

Una vez que tengas todo esto listo, comienza:

  • Empieza en la base del cuello con solo un dedo de cada mano y ve hacia los hombros ejerciendo presión.
  • Desliza la mano entera por el cuello.
  • Aprieta los músculos que notes tensos con los pulgares.
  • Haz movimientos rotativos.
  • Ejerce presión en la zona baja del cuello y los omoplatos que es donde mayor tensión se concentra.
  • Masajes los brazos.
  • No ejerzas mucha presión al bajar por la columna y hazlo siempre con la mano completa.

¡Ya estás listo para comenzar a practicar!